Resulta que ya empecé a escribir cuatro textos distintos porque me cebó la cantidad de gente que se metió en el blog. Ya lo dije en FB: gracias.
Pero lo más extraño de mi día hoy fue que el 85% de la gente que me crucé (de manera real, de manera virtual pública, de manera virtual privada) me dijo:
- que escriba el texto que prometí sobre Don Draper
- que escriba sobre el look jean+ saco de los psicólogos
- que explique por qué no voy a ver a Sonic Youth
- que inicie un ciclo "Amores prohibidos"
- que ponga la frase que dije hoy en una conversación: "si estuviera completamente feliz, sería ridículo"
- que me haga tanguera y aikidoka
- que suba más cosas de esas que escribo sobre mi vida cotidiana (tales como los pensamientos a la hora de la cena o las instrucciones sobre cocina)
- que ya sabían que todo lo que escribo es mentira
- que cómo que todo lo que escribo es mentira, que me iban a denunciar públicamente
- que saben que es verdad porque ellos son una de las personas que nombro
- que saben que es verdad porque ellos saben que es verdad
- que qué bueno el concepto de "porno psicológico", que lo desarrole más
- que escriba más cosas de música, sobre los videos que subo
- que escriba sobre series porque gracias a los post del blog anterior descubrieron algunas series que estaban buenísmas
- que quieren comentar pero se inhiben. Y que siempre los que comentan son: ...(me dieron nombre y apellido de las personas)
- que hoy seguro comentaban
- que organice los comentarios: que los mande al blog y que no lo hagan en FB
- que qué buena que estaba la relexión sobre el olvido
- que no me olvide de poner mi lista de preferidos de El Niño Gusano
- que escriba más seguido
- que escriba sobre Curb
- que escriba sobre los Flight og the Conchords
- que le sume a este blog las listas (mi blog anterior al anterior)
- que tome mucho sol
- que no saben cómo subir un comentario
- y por último, cierta persona famosa en mi muro, amiga queridísma, arengó, por mail, a todas mis amigas no digitales a que subieran sus cosas a internet
Todo esto en el día de hoy. Lo voy a hacer. No lo juro, pero, digamos que lo prometo.
Pero lo más extraño de mi día hoy fue que el 85% de la gente que me crucé (de manera real, de manera virtual pública, de manera virtual privada) me dijo:
- que escriba el texto que prometí sobre Don Draper
- que escriba sobre el look jean+ saco de los psicólogos
- que explique por qué no voy a ver a Sonic Youth
- que inicie un ciclo "Amores prohibidos"
- que ponga la frase que dije hoy en una conversación: "si estuviera completamente feliz, sería ridículo"
- que me haga tanguera y aikidoka
- que suba más cosas de esas que escribo sobre mi vida cotidiana (tales como los pensamientos a la hora de la cena o las instrucciones sobre cocina)
- que ya sabían que todo lo que escribo es mentira
- que cómo que todo lo que escribo es mentira, que me iban a denunciar públicamente
- que saben que es verdad porque ellos son una de las personas que nombro
- que saben que es verdad porque ellos saben que es verdad
- que qué bueno el concepto de "porno psicológico", que lo desarrole más
- que escriba más cosas de música, sobre los videos que subo
- que escriba sobre series porque gracias a los post del blog anterior descubrieron algunas series que estaban buenísmas
- que quieren comentar pero se inhiben. Y que siempre los que comentan son: ...(me dieron nombre y apellido de las personas)
- que hoy seguro comentaban
- que organice los comentarios: que los mande al blog y que no lo hagan en FB
- que qué buena que estaba la relexión sobre el olvido
- que no me olvide de poner mi lista de preferidos de El Niño Gusano
- que escriba más seguido
- que escriba sobre Curb
- que escriba sobre los Flight og the Conchords
- que le sume a este blog las listas (mi blog anterior al anterior)
- que tome mucho sol
- que no saben cómo subir un comentario
- y por último, cierta persona famosa en mi muro, amiga queridísma, arengó, por mail, a todas mis amigas no digitales a que subieran sus cosas a internet
Todo esto en el día de hoy. Lo voy a hacer. No lo juro, pero, digamos que lo prometo.